Hace ya 15 días del fallecimiento de nuestro capitán Dani Jarque, el capitán que inauguró nuestro estadio, el capitán que en la temporada pasada fue el líder del equipo para sacarnos adelante, el capitán del Espanyol ahora y siempre.
Cuando hace 15 dias Oscar me llamó cuando eran un poco más de las 10, ese sábado trágico, y me dió la notícia la verdad es que apenas pude decirle nada. Al rato el tlf. no paraba de sonar, recibí mensajes y llamadas, todas con la incredulidad de lo acontecido y llenas de apoyo y cariño. Yo me pasé hasta altas horas de la noche en contacto con mi hermano, ya que estaba en Cornellà y pasó gran parte de la noche en la puerta 21. Yo apenas pude dormir y al dia siguiente viendo la noticias a 831 kilómetros de esa puerta 21 no podía reprimir mi emoción, y es que hacia una semana que habíamos inaugurado nuestro estadio, que Jarque salia por la puerta de vestuarios para defender el que es su equipo de siempre y ahora ya no lo tenemos.
Desgraciadamente hace falta que se produzca una tragedia para que afloren los sentimientos más humanos de las personas, aun recuerdo la tragedia de Antonio Puerta, ( cuanto paralelismo con Dani ), como un drama humano hace unir en el dolor a todas las aficiones. Se ha vivido estos dias y se sigue viviendo muestras de solidaridad y emoción, todo esto quedará en el recuerdo de todos pero seria bonito que ese recuerdo perdurase eternamente y nos haga a todos más humanos y solidarios.
Dani Jarque representaba todo lo bueno del fútbol, un jugador que se abrió camino en la vida con esfuerzo e ilusión a través del fútbol. Una historia que guarda mucho paralelismo con la del Espanyol, un club acostumbrado a forjarse en las dificultades. Jarque no solo representaba los valores del fútbol, también lideraba los del Espanyol, catalán, de la cantera , desde la base había llegado a la capitanía del primer equipo. El destino ha sido cruel, nunca olvidaré que en una habitación de hotel, la 506 cerca de Florencia, Dani Jarque mi capitán nos dejó, pero nunca nos dejará en nuestros corazones. Descanse en paz.
Cuando hace 15 dias Oscar me llamó cuando eran un poco más de las 10, ese sábado trágico, y me dió la notícia la verdad es que apenas pude decirle nada. Al rato el tlf. no paraba de sonar, recibí mensajes y llamadas, todas con la incredulidad de lo acontecido y llenas de apoyo y cariño. Yo me pasé hasta altas horas de la noche en contacto con mi hermano, ya que estaba en Cornellà y pasó gran parte de la noche en la puerta 21. Yo apenas pude dormir y al dia siguiente viendo la noticias a 831 kilómetros de esa puerta 21 no podía reprimir mi emoción, y es que hacia una semana que habíamos inaugurado nuestro estadio, que Jarque salia por la puerta de vestuarios para defender el que es su equipo de siempre y ahora ya no lo tenemos.
Desgraciadamente hace falta que se produzca una tragedia para que afloren los sentimientos más humanos de las personas, aun recuerdo la tragedia de Antonio Puerta, ( cuanto paralelismo con Dani ), como un drama humano hace unir en el dolor a todas las aficiones. Se ha vivido estos dias y se sigue viviendo muestras de solidaridad y emoción, todo esto quedará en el recuerdo de todos pero seria bonito que ese recuerdo perdurase eternamente y nos haga a todos más humanos y solidarios.
Dani Jarque representaba todo lo bueno del fútbol, un jugador que se abrió camino en la vida con esfuerzo e ilusión a través del fútbol. Una historia que guarda mucho paralelismo con la del Espanyol, un club acostumbrado a forjarse en las dificultades. Jarque no solo representaba los valores del fútbol, también lideraba los del Espanyol, catalán, de la cantera , desde la base había llegado a la capitanía del primer equipo. El destino ha sido cruel, nunca olvidaré que en una habitación de hotel, la 506 cerca de Florencia, Dani Jarque mi capitán nos dejó, pero nunca nos dejará en nuestros corazones. Descanse en paz.
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