Llorarán su ausencia cuando se vaya, su gloria será infinita y pasarán muchos años para que alguien pueda estar a su altura ya que aunque llegue uno y empiece a sumar títulos, no será lo mismo ni por asomo. El escocés cambió el estilo, las formas y los impulsos. Ahora el United es un club camaleónico que sólo juega para ganar y lo hace desde mil formas diferentes: a la contra, a la posesión, esperando atrás o ahogando arriba, tras oleadas de buen fútbol o tras jugar rácano a una jugada y un momento.
Tras el Schalke, Wembley. Tras el Arsenal, el Chelsea. Una vez más, el United. Quedan tres episodios para la Premier, los “red devils” sueñan con superar en títulos al Liverpool. Shankly o Ferguson, ellos son el libro de estilo. Ganadores que hicieron que su club fuese leyenda con su presencia. No es ganar, es llegar. El objetivo de los grandes no son los títulos, eso no es más que una ficción de los medios; la idea es competir y llegar hasta el final, ser ganadores hasta el momento del cara o cruz. Un segundo de inspiración te lleva a la gloria, una décima de error te envía al calabozo.
En lo futbolístico, reinvención. Con líneas básicas, parámetros ajustados y cambio constante de roles, uno de los secretos es mantener el clima, para ello su guardia pretoriana es básica, y la ambición. Ahí Ferguson tira de gestión de plantilla. Comprar y vender, cualquier atisbo de desgaste supone la venta obligada. Su mayor virtud es la capacidad para sacarse cracks de encima como si le estuvieran desgarrando. Así lo hizo con Beckham y Cristiano Ronaldo.
Sabia nueva al poder, Chicharito forma dupla con Rooney, de suplente habitual y adecuado plan B ha pasado a ser el socio perfecto del Bad Boy. Con los lesionados de vuelta, Ferdinand y Vidic, así como la vuelta en tiempo y forma del ecuatoriano Antonio Valencia, con Carrick mejorando sus prestaciones y el eterno Van der Sar sacándolas todas. Tiene sustituto, uno de los nuestros, será David De Gea, pero a nadie se le escapa que el arquero holandés lo deja porque quiere. Está espléndido , inmenso, las para y da un primer pase bueno en salida de balón que provoca que el United sea un equipo de incalculable valor.
Queda definir cuantos títulos serán, contar con el azar y celebrar que un año más han estado ahí. Tras esto llegará el verano, los fichajes y la asimilación. Existen equipos, cada uno tiene su estilo y personalidad pero sólo hay uno que vaya por delante, el United. La tradición es ganar, más cerca o más lejos, casi nunca con los mejores. Sir Alex Ferguson lo ha conseguido, los “red devils “ sobreviven ante cualquier adversario. El City y el Chelsea tienen talonario, el Arsenal es el fútbol y el Liverpool es la tradición pero más allá de lo que ocurra en un partido puntual, todos ellos buscan imitar la mentalidad del ganador habitual, del que nunca se cansa de ganar, del gran dictador que paso a paso ha conseguido el pedestal. Con virtudes y defectos ha conseguido que su retirada sea garantía de que Shankly ya no es el más grande.
por Marcos Lopez
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